Orando por mi cónyuge

Orando por mi cónyuge

Orar por tu cónyuge fortalece tu matrimonios en todos los aspectos de la relación. La  transformación  se notará en ti primero , pero poco a poco iras viendo el cambio en tu cónyuge también. Pastora Xenia a.

“Más valen dos que uno solo, pues tienen mejor remuneración por su trabajo.Porque si uno de ellos cae, el otro levantará a su compañero; pero ¡ay del que cae cuando no hay otro que lo levante! Además, si dos se acuestan juntos se mantienen calientes, pero uno solo ¿cómo se calentará? Y si alguien puede prevalecer contra el que está solo, dos lo resistirán. Un cordel de tres hilos no se rompe fácilmente” (Eclesiastés 4:9-12).

Formar un matrimonio fuerte y equilibrado nos es fácil, requiere que ambos seamos intencionales y por supuesto, que oremos el uno por el otro. Cuando intencionalmente nos humillamos delante de Dios y oramos por nuestro cónyuge nuestro corazón se abre y reblandece, se suaviza permitiendo que Dios pueda trabajar con mi corazón y con el de mi cónyuge. La pregunta en algunas situaciones es ¿Debería orar? ¿Que tal si el matrimonio ha sido tan difícil que a duras penas podemos mencionar palabras de esperanza? Bueno, pues es aquí precisamente donde debemos tomar la decision de perdonar para sanar nuestro corazón y cuando nuestras palabras no salen entonces tenemos el recurso de la palabra de Dios y esta entra en acción.

Aprender a orar usando y estando en la palabra de Dios ha sido algo Que Dios ha utilizado en mi vida cuando he estado desesperada, dolida y sin palabras. Orar después de leer la Biblia me da palabras cuando yo ya no tengo ninguna al igual que me ha dado la confianza de orar por que se que lo hago de acuerdo a su voluntad tal y como sus palabras mismas lo dicen en la escritura. Orar estando en la palabra de Dios es para los que estamos quebrantados y débiles, como yo lo he estado muchas veces. Orar de esta manera es para todos no para unos cuantos. Que tal si le decimos al Señor que nuestro hogar sea edificado en tu sabiduría pues su palabra dice: “Con sabiduría se edifica una casa, y con prudencia se afianza; con conocimiento se llenan las cámaras de todo bien preciado y deseable.” (Prov. 24:3-4). También podemos seguir orando así: "Señor, que nuestro deleite se encuentre en ti, permítenos meditar en tu ley día y noche, por que al hacerlo nuestro matrimonio y familia serán como árboles plantados junto a ríos de aguas vivas que da su fruto a tiempo y su hoja no cae.) pues tu palabra dice “¡Cuán bienaventurado es el hombre que no anda en el consejo de los impíos, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se sienta en la silla de los escarnecedores, sino que en la ley del SEÑOR está su deleite, y en su ley medita de día y de noche! Será como árbol firmemente plantado junto a corrientes de agua, que da su fruto a su tiempo, y su hoja no se marchita; en todo lo que hace, prospera.”Salmo 11:3. Señor, permite que podamos regocijarnos en la compañía mutua y que de la misma manera tú puedas regocijarte de nuestro matrimonio, como dice tu palabra "Porque como el joven se desposa con la doncella, te desposaran tus hijos; y cómo se regocija el novio por la novia, tu Dios se regocijará por ti.” (Isaias 62:5). Señor, ayúdanos a no ser egoístas por nuestra propia ambición. Danos corazones humildes sin ver solamente por nuestro propio interés personal. que nuestros pensamientos sean cautivos a la mente de la voluntad de Cristo para nuestro matrimonio, danos la mente como la de Cristo como dice tu palabra: "Nada hagáis por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de vosotros considere al otro como más importante que a sí mismo, no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás. Haya, pues, en vosotros esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres.” (Filipenses 2:3-7) . Ademas, Señor, no permitas que nunca nos olvidemos de que Tu nos rescataste de las tinieblas y que de esa misma manera podamos perdonar, tener paciencia y amar a nuestro cónyuge para que te glorifiques en esta relación y seamos usados para tu gloria y honra amen.

Bien ahora Padre celestial hago una oración por cada matrimonio en el mundo no importa de qué raza o nación ellos sean; que seas tu mostrándote en cada uno de ellos para que te conozcan como Señor y Salvador de sus vidas y que sus matrimonios sean fortalecidos en tu presencia. Quiero darte alabanzas porque tú has creado al hombre y a la mujer para que el uno sea para el otro ayuda y apoyo en todos los aspectos de la vida, no importa que tan bueno o malo sean los tiempos siempre estaran unidos y fortalecidos en ti oh Dios. Te pido que hoy abras los cielos para cada uno de los matrimonios que estén leyendo este tema, los pongo delante de ti protégelos, concédeles que el amor entre ellos sea de entrega mutua, que la actitud sea de perdón y paciencia el uno para el otro en todo momento. Que ellos busquen crecer a la imagen de Cristo a través de tu palabra para que sean un testimonio para aquellos que no te conocen todavía, pero sobre todo para que impacten sus generaciones. Te pido que los Ilumines y fortalezcas en la responsabilidad de la formación de sus hijos, para que sean auténticos cristianos que te amen con todo el corazón. Que haya armonía en sus hogares para que se animen y protejan los unos a otros en medio de las adversidades de la vida. Que la alegría y la tristeza de uno sea del otro también. Que la unidad de tu Santo Espíritu sea con ellos porque dos son mejor que uno dice tu palabra. Que se amen de tal manera para que estén unidos hasta que la muerte los separe. Ahora los dejo en tus preciosas manos amado Señor para que los guíes en todo tiempo y les guardes de todo mal. En el poderoso nombre de JESUS amén y amén♥ Con amor su amiga de siempre Pastora Xenia Alvarez. www.mujeresdeexcelenciausa.blogspot.com
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