Cómo hacer tu devocional
EL AYUNO DE DANIEL·
Se conoce como “devocional” a ese momento especial del día que dedicamos a la comunión con Dios.
A continuación, les daré algunas ideas o sugerencias de cómo prepararse para el devocional. Esta práctica no es solamente para cuando estamos ayunando, sino que algunas personas lo hacen todos los días. Lo importante es apegarse al propósito de este momento: buscar a Dios para hablar con El, para aprender de su Palabra, para crecer espiritualmente y para conocer mejor las escrituras.
1. Trata de mantener estos materiales en el mismo lugar. Un lugar que apartaras para reunirte con el Señor todos los días. De preferencia, elige el mismo lugar, pero cualquier habitación de la casa o un lugar tranquilo, sin distracciones. Como nota extra, apaga el celular y dejalo en otra habitación, para que no te distraigas durante el devocional.
2. Antes de comenzar a leer la biblia, ORAR. Invocar al Espíritu Santo para que te guíe en la lectura y la meditación de la Palabra. Comienza la oración alabando al Señor, agradeciendo por todas sus bondades, por la vida, por el aire que respiras, por la familia, etc.
3. Elegir un libro de la biblia que te interese leer. No se recomienda abrir la biblia al azar para evitar perderse detalles del libro o el contexto.
4. Comenzar a leer el libro desde el principio. Lee un capítulo, o una porción de algunos cuantos versículos, detenidamente. Si hubieran palabras cuyo significado no conoces, anótalas en el cuaderno para buscar el significado más tarde. No te detengas, y continúa leyendo. Luego, lee la misma porción una vez más, y otra vez si lo deseas. Al terminar, piensa en esa escritura, piensa en lo que el Señor quiere comunicarte. Habla con el Padre sobre lo que has comprendido y meditado.
5. Anota en el cuaderno lo que venga a tu corazón después de haber orado, leído y conversado con Dios.
6. Al siguiente día, continúa leyendo el libro y sigue así, hasta terminarlo. Luego empieza con otro, y asi sucesivamente. Si lo deseas, después de algún tiempo, puedes elegir uno de los libros que ya hayas estudiado, y meditar en él una vez más. El Señor te sorprenderá!
Es admirable darse cuenta, después de algún tiempo de hacer el devocional, de lo mucho que se aprende. Personalmente, dedico el tiempo del devocional a escudriñar las escrituras, para conversar con Él, para orar alabando Su nombre, para agradecer por todo lo que me rodea, por las personas que conozco, por el trabajo, por las provisiones de todos los días.
El Señor te sorprenderá!
Recuerden, no hay normas establecidas de cómo hacer un devocional, lo arriba descrito son sólo sugerencias. Si desean agregar o cambiar algo, pueden hacerlo con libertad y compartir algunas otras ideas.
Que Dios les bendiga, y es mi deseo porque todos encontremos un tiempo para dejar de hacer lo que sea por encontrarnos a solas con Dios y permitirle al Espíritu Santo y a nuestro Salvador Jesucristo, que moldean nuestros corazones de acuerdo a su Palabra. Co todo amor su amiga de siempre Pastora Xenia Alvarez
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